Seguramente el complemento de belleza más común en los hogares es el secador. Si os paseáis por cualquier tienda de barrio o gran superficie, veréis infinidad de modelos y marcas con distintas funcionalidades y accesorios. Pero, ¿qué diferencia hay entre uno modelo y otro?
Habrá quienes simplemente se decanten por una marca conocida con un precio aceptable, pero si quieres saber qué compras, te explicamos los conceptos básicos:
1 - Dimensiones y peso
Esta es seguramente el primer aspecto a tener en cuenta. El tamaño del secador puede oscilar desde los cada vez más diminutos secadores de viaje hasta los modelos más profesionales y robustos. Los portátiles están pensados para un uso puntual, suelen tener poca potencia por lo y con un intensivo quemaremos el motor en poco tiempo. Los secadores profesionales suelen ser más potentes pero acostumbran a pesar y consumir demasiado. Dentro de la gama de secadores domésticos es necesario elegir uno relativamente ligero, recordad que lo cargaréis cada vez que os sequéis el cabello.
2 - Prestaciones
Hoy en día lo secadores incorporan tecnologías que cuidan, protegen y dan brillo al cabello. Uno de las incorporaciones que más está calando, no solo en lo secadores también en otros pequeños electrodomésticos, es la tecnología iónica. Los secadores iónicos equilibran la carga iónica del cabello evitando el encrespamiento que afecta sobre todo a los cabellos finos y secos. Otras incorporaciones son es el calor por infrarrojos o la turmalina que reparten el calor de manera más uniforme dañando menos la melena y reduciendo el tiempo de secado, además dividen las gotas de agua, haciendo que el cabello absorba la humedad y luzca más hidratado.
3 - Potencia y velocidad
La mayoría de modelos de secadores se mueven entre los 1000W y 2500W. Los de mayor potencia consiguen unos resultados más rápidos y profesionales. Pero si tu cabello es fino y con tendencia a la sequedad, se recomiendan aparatos con una potencias entre 1700W y 2000W para evitar castigar al cabello en exceso.
Casi todos los secadores cuentan con varias temperaturas y velocidades e incorporan la función de golpe de aire frío. Las temperaturas más elevadas y las mayores velocidades permiten obtener resultados profesionales y reducen el tiempo de secado. Del mismo modo las temperaturas suaves y las velocidades menores permiten secar el cabello de un modo menos agresivo. Si tu cabello es fino o con tendencia a la sequedad, deberás evitar usar las velocidades y temperaturas más altas.
El golpe de aire frío es una funcionalidad que se incorporó hace ya unos años en los secadores y que actualmente lo incorporan casi todos los modelos. Se recomienda terminar el secado siempre con un poco de aire frío. De este modo sellaremos la cutícula del pelo con lo que evitaremos dañarlo y fijaremos el peinado.
Los accesorios o el tipo de cable son otros aspectos a tener en cuenta, harán más funcional el secador y nos simplificaran la obtención de resultados profesionales.